El síndrome de ovario poliquístico, es un trastorno endocrino que causa uno de los desequilibrios hormonales más frecuentes en mujeres de edad reproductiva. Su descripción clásica era la aparición de amenorrea (ausencia de regla), obesidad e hirsutismo (aparición de vello en zonas en las que no debería existir).
A grandes rasgos, consiste en que no se producen ovulaciones de forma correcta, por lo que la regla viene de forma irregular y pueden producirse dificultades para conseguir una gestación. Al no existir ovulaciones correctas, el ovario no es capaz de producir las hormonas habituales, existiendo un exceso de hormonas con efecto masculinizante, que producen aumento de vello. Cuando se realiza una ecografía, se aprecia una imagen característica con la existencia de muchos puntos negros en cada ovario, por lo que recibe el nombre de poliquístico. Este nombre puede llevar a error, porque en realidad las imágenes no corresponden a quistes sino a folículos que no se desarrollan adecuadamente. Los folículos son estructuras normales del ovario, y algunos de ellos tienen que crecer cada mes para llegar a producir la ovulación.
El tratamiento del síndrome de ovario poliquístico varía dependiendo de la edad de la paciente, de su sintomatología y de sus deseos de fertilidad.